Muy temprano, llegamos a Panamá. La idea es aprovechar nuestros 10 días de viaje, los cuales se reparten de este modo:
- Viernes-sábado: Panamá
- Sábado-sábado: Crucero
- Sábado-domingo: Panamá
Llegamos al hotel, dejamos las maletas y fuimos a almorzar y mirar vitrinas en el centro comercial que hay al lado y que, muy convenientemente, está comunicado con un paso elevado con el hotel. Volvimos, y después de un check-in amenizado por música rock (nos quedamos en el Decameron Hard Rock) dejamos las maletas en la habitación y bajamos al bar de la piscina a tomarnos algo, fumar -quienes lo hacen- y charlar un rato.
El bar prepara unos excelentes mojitos, margaritas y piñas coladas, que fue más o menos la elección de todos. Del mojito pasamos a caminar y a ver los almacenes cercanos al hotel y al centro comercial. Aproveché para comprar una pijama -ya que la que traía muy oportunamente se rompió- y me devolví al hotel, a descansar.